Consejos ahorrar calefacción
No pongas la calefacción a demasiados grados. Si con 21 grados de media y una chaqueta no tienes frío, no pongas 22 o 23. Cada grado de calefacción que aumentas suma considerablemente la factura.
Ventila diez minutos al día. Es necesario por salud, aunque entre frío, para que circule el aire fresco. Ventila antes de poner la calefacción.
Apaga la calefacción por la noche. Mientras duermes no la necesitas. Lo ideal es que la programes un par de horas al día y tras ventilar.
Cierra los radiadores que no necesites. Seguro que hay algunos que no usas. De ser así, lo mejor es que los cierres.
Cuidado con la programación de la calefacción. Si la tienes programada todos los días para las mismas horas, asegúrate de pararlo si te vas de vacaciones o si vas a estar unos días fuera. Es común olvidarse.
Compra un termostato. Igual no te apetece gastar 15 o 20€ en uno, pero merece mucho la pena. Podrás regular la climatización de tu casa y ahorrar energía.
Cambia de sitio los radiadores. Ponlos a los pies de la ventana. ¿El motivo? Se crea una cortina de aire caliente capaz de atenuar la exposición al frío exterior.
Detecta las corrientes de tu casa. Se encuentra por debajo de las puertas, ventanas principalmente. Puedes utilizar masilla o silicona para cubrirlas.
Buen aislamiento. Asegúrate de contar con un buen aislamiento para que no entre frío en tu casa por ninguna ranura.
Calefactores o radiadores solo de bajo consumo. Si quieres complementar la calefacción con estos aparatos, mejor que sean de alta calificación energética y bajo consumo.
Esperamos que te sean de ayuda nuestros consejos para ahorrar este invierno. Es una forma de gestionar de manera eficiente la calefacción en tu casa, para que estés a buena temperatura gastando lo mínimo en tu factura.